Una de mis nuevas pseudo-teorías, de esas que acostumbro, esas que no tienen mayor fundamento que aquella corriente conocida como el porquelodigoyoismo, habla acerca de la inexistencia de todo. Un poema que anda por ahí rondando dice mas o menos algo así: el último hombre que quedó en la tierra supo que la muerte no existe, por que al quedarse sólo se dio cuenta que la muerte solo existe a los ojos de los demás.

¿ Y si nada realmente existiera ? ¿ si al final nos dieramos cuenta de que lo que creemos que existe, solo existe por que todos lo ven ? ¿ si el amor, la razón, la inteligencia, la tristeza, la alegría y todas esas cosas fueran espejismos alimentados por la sed individual y creados por la histeria colectiva deseosa de encontrar una razón válida para quedarse en este mundo ?

Después de este post rodeado de inutilidad-divagación-pseudo-philosophico sólo copiaré esta gran frase:

él, se sentia indescifrable para si mismo y queria ser legible para los demás

Le fui dando largas a este post por dos razones, la primera han sido días muy cercanos a "la chingada" aquel lugar que esta tan cerca del cielo como del infierno, y la segunda, no quería escribir un post de ardido que pasa solo el 14 de febrero, así que aquí va el post que ahora es post 14 de febrero.

Esta de más hablar de mi vida amorosa, a nadie le interesa, últimamente ni a mi. Aquí va una confesión más de las que ya me estoy acostumbrando a hacer: EL AMOR ME DA MIEDO... ajaaaaaa .. así nada más... sin razón, sin sentido... igual que mi miedo a los caballos y a las arañas. Apenas veo un rasgo de amor y corro... las razones ocultas fueron ya reveladas en un post anterior titulado "De noche" donde explico como es que con el amor dejo de funcionar... y entonces para alguien acostumbrado a la productivida y al stress, eso es un crimen imperdonable.

Entonces, ahí me tienen huyendo de esa cosa a la que llaman amooooor... como sea... pensaba... que el amor es como los zapatos, y enamorarse es querer ponerse los zapatos de otro y entonces empiezan las complicaciones, primero... ¿y si no somos del mismo número?... y aquí es donde viene el dicho sabio ( que a muchas personas les valdría memorizar) : A fuerzas... ni los zapatos entran. Segundo, suponiendo que el número coincide, tomemos en cuenta que cada quién horma sus zapatos a la forma estricta y única de sus pies, así que al final no nos quedarán del todo bien. Luego viene el tiempo y comienzas a darte cuenta que se han desgastado...tienen un olor raro y comienzan a cansar, es en ese momento cuando pasas por una tienda y ves unos zapatos relucientes y lindos... y el resto de la historia, todos la sabemos o la hemos vivido de un lado o del otro.

Suena triste, lo es.

Pero como no quiero quedar como el grinch ante todos aquellos que estan maravillosamente enamorados.. pues mire usted, ya le manejamos lo que es la solución a los problemas del amor... y se la venimos trayendo hasta la comodidad de este su blog favorito y lo mejor, no le costará nada: en el amor hay que aprender a decir ( y no nada más a decir) todas las cosas que tu esperas de mi, nunca las seré... todas las cosas que espero de tí, nunca serás y eso es justo, por que así es la vida.. y de por medio, hay un sentimiento tan grande que nos mantiene juntos y ahí el amor se vuelve perfecto por que somos libres de ser uno y otro.

Al final, 1 + 1 = 1 + 1, lo cual lejos de ser malo es muy bueno ya que se trata sólo de compartir, por que compartir potencializa, el amor es una lupa, no te convierte en nada nuevo, sólo maximiza todo lo que ya eres.

Genial!!! ahora solo me falta encontrar a quien decírselo, mientras tanto les dejo la muy bonita canción/video de donde salió este post. Notesé que al final ni se toman la mano peroooo.. todos sabemos que se aman. Punto final a estos temas.